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El ecosistema médico farmacéutico de Barcelona: una ventana de oportunidades

El ecosistema médico farmacéutico de Barcelona: una ventana de oportunidades

Diego Pol

Partner Dentons

Carlos Menendez

Order to cash Manager, Bayer

Los ingredientes del éxito

Barcelona posee todos los elementos de la cadena de valor para lograr el éxito en el sector farmacéutico y, de forma más amplia, en el sector de la salud. La existencia de este ecosistema (que comprende universidades, centros de investigación, hospitales, empresas nacionales y multinacionales, start-ups, fondos de inversión especializados, etc.) en este momento en nuestra ciudad, nos brinda una oportunidad única en un sector que ha evolucionado de ser un poder industrial a un poder de conocimiento. 

El sector emplea más de 20.000 personas.  El PIB asociado al mismo es equivalente al de otros sectores estratégicos como el turismo o la automoción. Aproximadamente el 60% de los productos farmacéuticos que se producen en España tienen su origen en Catalunya. Es en Barcelona donde se concentran la mayoría de los inversores institucionales especializados en el sector salud.

Nuestro sistema sanitario es referencia mundial, tenemos talento y más de ochenta centros de investigación de capital privado y público en la Gran Barcelona.

La ciudad es un foco de ensayos clínicos a nivel europeo y referencia a nivel estatal, generando el 40% de las patentes que se registran anualmente en España.

La apuesta estratégica por este sector en los últimos 20 años está dando sus frutos, destacando la mejora de las infraestructuras mediante la inversión en parques científicos y de investigación. Centros donde los investigadores realizan estudios y análisis que después se convierten en patentes y finalmente en productos.

Por otro lado, el sector farmacéutico en el que somos referentes tiene una diversidad única de pequeñas, medianas y grandes empresas de origen familiar y multinacional invierte y se nutre de esta investigación para lanzar nuevos productos en una industria que se ha mostrado robusta en esta crisis sanitaria y económica.

En Barcelona conviven más de 700 startups dedicadas a la biotecnología. El desarrollo de productos sanitarios y la digitalización del sector; vivimos un boom del sector y es el único que ha seguido creciendo en inversión en el último año.

Las empresas farmacéuticas y del sector de la salud pueden aprovechar este ecosistema único que tenemos en Barcelona para aunar esfuerzos con objetivos comunes para dar cura a las enfermedades que afectan a la población y mejorar el bienestar de todos.

¿Cómo seguir mejorando?

Sin desaprovechar ni descuidar el ecosistema que existe en Barcelona, que es imprescindible (al igual que las redes que se tejen entre sus diferentes componentes), debemos pensar de forma global para ser un player global. Aspiremos a atraer grandes inversores extranjeros y animemos a nuestros inversores a invertir también fuera.

Sigamos en internacionalizándonos, como tantas empresas ya han hecho con éxito, y compitamos decididamente para atraer hubs regionales de las grandes farmacéuticas. La ciencia es global y no entiende de fronteras.

Tenemos que afrontar el reto de retener el talento con condiciones equiparables a otras regiones del mundo, ofreciendo sueldos dignos, estabilidad laboral y el reconocimiento que su labor merece.

Es necesario también formar a nuestros científicos con herramientas para el emprendimiento, para que sepan transformar una patente en una startup que atraiga inversión internacional.

El acceso a la inversión sigue siendo complicado y debemos mostrar internacionalmente el potencial de nuestra región para atraerlo.

Para ser más atractivos es importante trabajar palancas como los incentivos fiscales que permitan atraer talento y que las startups establezcan sus oficinas en la ciudad. Igualmente, existe una relación entre innovación y el riesgo que la empresa está dispuesta a asumir. En este sentido, debe trabajarse en proporcionar un marco regulatorio y un ambiente político que brinde la seguridad y estabilidad necesarias para comprometer inversiones importantes en innovación.

Es así que, sería conveniente que la industria farmacéutica trabajara de forma conjunta con todos los players y grupos de interés para cambiar la imagen que tiene la opinión pública sobre el sector. Si bien se trata de una industria cuyos productos salvan vidas y curan enfermedades, la percepción pública de la misma, según varios barómetros y encuestas de opinión, no está alineada con ese impacto social tan positivo.

Finalmente, el tamaño de las empresas para acometer inversiones importa.

Muchas de las principales empresas del sector de Barcelona tienen carácter familiar, lo cual a menudo limita la capacidad (y voluntad) de crecimiento. Por ello es más importante todavía que Barcelona se convierta en un centro de alianzas estratégicas (entre empresas, centros de investigación, administraciones públicas y demás) para canalizar inversiones en I+D y compartir los riesgos asociados.

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